Tres son los deseos que puedes pedir a un genio. O al menos eso es lo que nos cuentan a cada rato. Siempre el héroe de la película o el cuento se equivoca al pedir los primeros dos: cosas egoístas, cosas que siempre ha anhelado pero que al obtenerlas se halla vacío en el éxito. Después de muchas desventuras el héroe logra remediar todo con el tercero y último deseo: todo vuelve a la normalidad...se queda con la princesa.
A lo mejor no siempre ocurre igual, pero es constante que siempre las grandes y misteriosas cosas vienen en cantidad de tres. La trifuerza, la trinidad, el pastel de tres leches; el bueno, el malo y el feo. ¿Qué pedirías hoy si te encontraras una lámpara mágica? ¿Serías capaz de pedir con tu primer deseo una cantidad infinita de deseos y tener todo lo que has querido? No se siente igual obtener algo con tu esfuerzo, que conseguirlo con facilidad. El reto nos da muchas veces una razón para seguir y superarnos. ¿Qué hay de es@ chic@ que te gusta? Pum!! ahora te adora. ¿Un auto? Pum!! ahora es tuyo, ¿qué tal una casa? puff!! es grande y tiene piscina, y pronto un traje mecánico de combate gigante (perdón me proyecté)
¿O pedirías revertir todas esas malas decisiones? ¿esos malos momentos?
Pero hemos tenido buenos momentos. Si regresas a ese instante, justo ese único lapso de tiempo que se ha quedado atrapado en tu memoria para siempre, gran felicidad ¿querrías revivirlo de nuevo? Quizá tienen más fuerza los recuerdos que sólo se viven una vez. Pero todo esto es un gran "que tal si"...y como los genios o la magia, pertenecen a un reino inagotable con la misma extensión que tu ego.
2 comentarios:
Me encantó el cierre. "La magia pertenece a un reino inagotable como la misma extensión de tu ego" Fascinante de verdad lo es. Felicidades.
Respondo a tu pregunta, y a mi propio EGO, Yo pediría el don de la clarividencia. ¿Tú?
Pediría volar, tengo esa ilusión desde chico, me ahorraría el autobús, pero luego que tal me tumba un helicóptero? XD
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